domingo, 26 de febrero de 2012

Arthur Mortimer dixit (VI)

A lo largo de mis días he pensado y pienso tanto en la muerte, en mi propia finitud, que creo esta presencia oscura se ha manifestado filtrándose por ósmosis en la inmensa mayoría de mis personajes protagonistas, que acaban habitualmente muriendo y siempre sufriendo. 

Cuando por algún extraño azar alguno sobrevive y termina entre las páginas de un final feliz, es porque esa idea ha surgido del mundo de los sueños, esto es, de mis deseos más luminosos.  Estos relatos resultan bonitos, sí, pero tan abracadabrantes que incluso a mí me parecen cuentos de hadas ajenos a mi pluma.


Arthur Mortimer, Conversaciones con un espejo de medio cuerpo.

5 comentarios:

  1. Me gusta y me intriga por partes iguales todo esto. Pero, este tío, quién es. Conocí a Arthur, el de Sherlock, pero lamento decir que a este no. He buscado poco y no he encontrado nada.
    Las citas me dejan descolocadísimo. Aunque entiendo esta obsesión por la muerte, sobre todo a cierta edad.
    Finitos somos.
    Un abrazo.

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  2. Ja, casi, casi lo firmo...

    Besos desde el aire

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  3. Gracias a los dos por comentar.

    Igor: Arthur Mortimer, que ciertamente tiene su relación con Holmes, es el reverso luminoso de los villanos literarios... todo lo luminoso que puede ser un reverso luminoso.
    Un abrazo.

    Rosa: siempre hay una pizca de sabiduría en sus palabras.
    Un beso (hacia el aire).

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  4. Aunque breve, el texto me ha parecido muy interesante.

    Y ya estoy siguiendo tu blog, como debe ser.

    Saludos.

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